Cisma entre Oriente y Occidente
Rus'-Byzantine War
El llamado Gran Cisma, ocurrió en 1054, y fue el conflicto religioso que enfrentó al jerarca de la Iglesia de Roma con los jerarcas eclesiásticos de la Iglesia ortodoxa. Ya llevaba tiempo gestándose, alrededor de 200 años con la entronización de Focio tras la deposición de Ignacio de Constantinopla en el año 858. Se dice que el Cisma fue el resultado de una relación difícil en el que hubo muchos desencuentros, pero cuando el Obispo de Roma dijo que debería ser primero entre sus iguales ("Primus inter pares") fue como desposeer a la iglesia ortodoxa de la importancia de sus obispos. Así en occidente el primus fue el Papa fue el obispo sucesor de San Pedro y en la iglesia ortodoxa es el Patriarca de Constantinopla, y aprovechando algo que ocurrió en Bulgaria se gestó el cisma y de él se separaron para siempre las iglesias cristiana occidental y oriental.
El Cisma de Focio
Se produjo en el siglo IX, cuando regía la sede romana el papa Nicolás I y era patriarca de Constantinopla el obispo San Ignacio.
El hecho de la negació de la sagrada comunión por parte de San Ignacio a un tío del emperador Miguel III (el borracho) por vivir licenciosamente con su nuera le grangeó el enfado del emperador y su ministro Bardas, que lo depusieron y desterraron el 23 de noviembre del año 858, y el seis dias nombraron nuevo patriarca a Focio, que en 5 días recibió todas las órdenes sagradas de manos de un obispo suspendido.
El papa de Roma no estuvo de acuerdo y el cisma duró del 863 al 867 y ser depuesto Focio, siendo restituido en constantinopal el legítimo patriarca Ignacio. Pero a la muerte de Ignacio volvió a ser nombrado patriarca Focio que intentó promover la separación de la iglesia.
Las causas que llevaron a Focio a romper con la iglesia de occidente se encuentra en la cláusula Filioque. Aunque esta separación fue breve, el gesto quedó como precedente para lo que vendría después.